El final de diciembre le dió a la patriada la aprobación de la comunidad malvinera y la certeza de que pasamos el punto de no retorno.
Primero fue la bendición de Doña Delicia Giachino, luego el apoyo explícito de Miguel Ríos (Comisión Permanente de Homenaje a la Gesta del Atlántico Sur) y finalmente la posibilidad de compartir la cena de fin de año del Coronel Seineldín.
Fuimos invitados por Tony Encinas, del Centro Patriótico Mercado Central. Y nuestro anfitrión en la reunión fue el periodista Ferrero, director de el Vocero Argentino. había representantes de varios programas de difusión de la causa de Malvinas y veteranos de guerra de distintos puntos del país. Con algunos ya nos conocíamos personalmente. De todos recibimos solidaridad y ánimo para seguir adelante.
Entre héroes y patriotas, nuestra presencia allí no se debía a ninguna virtud personal. Nuestra presencia allí tenía que ver con la misión que nos hemos comprometido llevar adelante.
Una patriada, un mensaje a Inglaterra y a los argentinos: es prioridad de este pueblo recuperar la integridad territorial. Dar combate en el territorio usurpado y contra los intereses que representan a los que cargan con la sangre de nuestros hermanos.
EL MOTOR QUE PRECISAMOS ES 50 ó 90 CABALLOS DE FUERZA, CUATRO O DOS TIEMPOS DE INYECCION. Necesitamos la colaboración de los compañeros, camaradas y amigos.
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