FUNDAMENTOS
Señora Presidenta:
Desde el año 1833, cuando el Reino Unido tomó posesión de
las Islas Malvinas, la
Nación Argentina ratifica su legítima e imprescriptible
soberanía sobre ellas y los espacios marítimos e insulares correspondientes,
por ser parte integrante del territorio nacional. La recuperación de dichos
territorios y el ejercicio pleno de la soberanía, respetando el modo de vida de
sus habitantes y conforme a los principios del Derecho Internacional,
constituyen un objetivo permanente e irrenunciable del pueblo argentino (Constitución
Nacional, Disposición Transitoria Primera).
Con la vuelta de la democracia, luego de la derrota en la Guerra de Malvinas, en
diciembre de 1983, Raúl Alfonsín asume la presidencia y desde su discurso
inaugural colocó a la recuperación de las Islas Malvinas como un objetivo
central de su gobierno. Desde el año 2003, con la llegada de Néstor Kirchner a la Casa Rosada, se ha
intensificado el reclamo por la soberanía de las Islas, llevando el Gobierno
Argentino ante Organismos internaciones y regionales, el pedido de diálogo y
reanudación de las negociaciones con el Gobierno Británico, a fin de de
encontrar una solución pacífica.
Mediante el presente Proyecto de Ley se busca reconocer,
homenajear y conmemorar distintos hechos y personas que se relacionan
directamente con la incansable lucha por la recuperación de las Islas Malvinas.
Es así que se propone cambiar la denominación de cuatro calles ubicadas en el
barrio porteño de la Recoleta,
en las cercanías de la
Embajada Británica, por otros que hagan referencia a aquellos
hechos y personas. Reconocimiento que será símbolo de un reclamo, que lejos de
disolverse por el transcurso del tiempo, cada día se hace más fuerte en nuestro
pueblo.
En dicho tenor, en primer lugar se solicita el cambio de nombre
de la calle "Dr. Luis Agote" por la de "Héroes de Malvinas
Argentinas",
"Gaucho" Rivero
El 26 de agosto de 1833, seis meses después de la ocupación
británica de las Islas Malvinas, Antonio "El Gaucho" Rivero, oriundo
de la provincia de Entre Ríos, encabezó una rebelión desconociendo la autoridad
impuesta por los británicos. Acompañado por un grupo de hombres criollos e
indígenas, dieron muerte a cinco colonos británicos, entre ellos al Capataz
Simón y al despensero William Dickson. Posteriormente, arriaron la bandera
inglesa e izaron la azul y blanca.
El "Gaucho" Rivero había llegado a la Isla en el año 1827 junto con
el Gobernador Luis Vernet, para ejercer allí el oficio de peón en una empresa.
El 3 de enero de 1833, el Reino Unido invade y ocupa por la fuerza las Islas,
siendo designado como administrador del Archipiélago el colono irlandés William
Dickson. Tales los hechos, el Gobernador Vernet renunció a su cargo y regresó a
Buenos Aires.
Debido a la explotación que sufrían los peones por parte de
los colonos, y a la situación económica y social insostenible, Rivero junto con
aquellos hombres, deciden sublevarse. Armados con facones, pistolas y espadas,
actuaron por sorpresa cuando aquellos se encontraban a solas. Los gauchos se
instalaron en la casa de la comandancia, izando allí la bandera argentina.
Permanecieron ahí unos meses hasta que a principios de 1834
llegan dos buques británicos para recuperar la usurpación, y así, aunque con
mucho esfuerzo, logran capturar y apresar a los gauchos rebeldes para
trasladarlos a Gran Bretaña. Allí permanecen unos meses en prisión, hasta que
el Ministerio Fiscal aconseja al Almirantazgo dejarlos en libertad y enviarlos
de regreso a Buenos Aires.
Se dice que el "Gaucho" Rivero falleció mucho
tiempo después en el Combate de Vuelta de Obligado, hecho que no está
confirmado oficialmente por la historia argentina. Mucho se ha dicho sobre los
motivos que llevaron a aquellos valientes hombres a realizar el levantamiento,
pero lo importante es que, como lo sostiene el historiador Felipe Pigna, el
levantamiento malvinero de 1833
"(…) es el de la unidad y coherencia de las luchas
sociales y nacionales, de la justicia social y de la soberanía nacional, de las
reivindicaciones populares y las patrióticas" .
En este proyecto de ley se propone reemplazar la
denominación de la calle "Guido" y de la Plaza Gelly y Obes,
por la de "Gaucho Rivero", como una manera de rescatar del olvido y
realizar el merecido homenaje a este valiente argentino, quien fue uno de los primeros
que defendieron nuestra soberanía sobre las Islas Malvinas.
Grupo Cóndor
El 28 de septiembre de 1966, durante la dictadura de Juan
Carlos Onganía, 17 jóvenes argentinos y una mujer argentina, tomaron el control
del vuelo 648 de Aerolíneas Argentinas, que había partido desde Buenos Aires
con destino a Río Gallegos. Aterrizaron el mismo en las Islas Malvinas y allí
izaron siete banderas argentinas que flamearon durante 36 horas. Su mensaje:
reclamar por la soberanía argentina sobre ese territorio. Esta hazaña es
conocida como "Operativo Cóndor".
Dardo Cabo, un joven periodista y afiliado a la Unión Obrera
Metalúrgica, de 25 años, era el jefe del grupo. Lo secundaba Alejandro
Giovenco, de 21 años. Ellos dos fueron los encargados de entrar a la cabina y
ordenar al comandante Ernesto Fernández García, que cambiara el rumbo del avión
hacia las Islas Malvinas. La periodista y dramaturga María Cristina Verrier, de
27 años, era la tercera al mando del grupo
El resto de los integrantes del Grupo Cóndor eran: Andrés
Castillo, de 23 años; Ricardo Ahe, de 20 años de edad, empleado; Norberto
Karasiewicz, 20 años, metalúrgico; Aldo Omar Ramírez, 18 años, estudiante; Juan
Carlos Bovo, 21 años, metalúrgico; Pedro Tursi, 29 años, empleado; Ramón
Sánchez, 20 años, obrero; Juan Carlos Rodríguez, 31 años, empleado; Luis
Caprara, 20 años, estudiante; Edelmiro Jesús Ramón Navarro, 27 años, empleado;
Fernando José Aguirre, 20 años, empleado; Fernando Lisardo, 20 años, empleado;
Pedro Bernardini, 28 años, metalúrgico; Edgardo Salcedo, 24 años, estudiante; y
Víctor Chazarreta, 32 años, metalúrgico.
"A las 8.42, aterrizaron en Puerto Stanley, detrás de
la casa del gobernador inglés sir Cosmo Dugal Patrick Thomas Haskard (ausente
ese día), sobre una pista para carreras hípicas. Abrieron las puertas, se
tiraron con sogas, desplegaron delante del avión en forma de abanico e izaron
siete banderas argentinas.
El suceso convocó a kelpers y jefes de la milicia de la
isla, inmediatamente tomados como rehenes 'hasta tanto el gobernador inglés
reconozca que estamos en territorio argentino', advirtió Dardo Cabo desde la
radio del avión. Bajo esa presión, se aprestaron a cantar el Himno Nacional.
(…) De pie y frente a la mirada de todos, Cabo proclamó: 'Ponemos hoy nuestros
pies en las Islas Malvinas Argentinas para reafirmar con nuestra presencia la
soberanía nacional y quedar como celosos custodios de la azul y blanca (...) O
concretamos nuestro futuro o moriremos con el pasado'. Luego rebautizó al lugar
como Puerto Rivero, en homenaje al gaucho Antonio Rivero que en 1833 se alzó
contra los ingleses y gobernó las islas por unos meses" .
Uno de sus compañeros recuerda que Dardo Cabo dijo antes de
iniciar la Operación:
“Muchachos, aunque nos cueste la vida. Lo de menos es que nos lleven presos a
Inglaterra. Lo más glorioso, que caigamos en el intento”. El reclamo de
soberanía se cumplió, y el hecho tuvo una gran repercusión mediática tanto en
Argentina como en Inglaterra. "(…) De antemano, los integrantes del grupo
sabían que en algún momento debían deponer las armas y luego morir o ser
juzgados" .
48 horas después depusieron la actitud, la resistencia había
terminado. "Los dieciocho jóvenes de entre 18 y 32 años, a quienes la CGT calificó de 'héroes',
fueron llevados al penal de Ushuaia y luego juzgados en Tierra del Fuego. Como
ése había sido el primer secuestro aéreo y en el país no había jurisprudencia
al respecto, las figuras con que se los condenó fueron privación ilegítima de
la libertad, portación de arma de guerra, asociación ilícita, piratería y robo
en descampado. Tres años de prisión fue la condena para Cabo, Giovenco y
Rodríguez; para el resto, nueve meses" .
Mediante el presente proyecto de ley buscamos reconocer la
heroica hazaña de estos/as 18 jóvenes argentinos/as, que reavivaron en aquel
momento el reclamo de nuestra soberanía sobre el territorio de las Islas
Malvinas. Por ello, se propone el cambio del nombre de la calle "Gelly y
Obes" por el de "Grupo Cóndor".
Crucero General Belgrano
El 2 de mayo de 1982, durante la Guerra de Malvinas, el
Crucero General Belgrano sufre un cruel ataque de un Submarino Nuclear
Británico. Luego de más de tres décadas de servicio en la Armada Argentina,
el Crucero es impactado por dos torpedos lanzados por el submarino nuclear
británico HMS Conqueror, a unas 205 millas al sudeste de las Islas Malvinas. A
los 20 minutos de haber recibido estas dos profundas puñaladas, el Belgrano
comenzaba a hundirse en las frías aguas del Atlántico sur, muriendo 323
marineros, sub-oficiales y oficiales a bordo. Fue el golpe más duro que
sufrieron las tropas argentinas.
El Crucero General Belgrano tenía una heroica historia:
integró la flota norteamericana con el nombre "Phoenix"; estuvo en el
ataque japonés a Pearl Harbor de 1941 saliendo ileso; y participó de la Segunda Guerra
Mundial. En el año 1951, el Presidente General Perón lo compró y le puso el
nombre "17 de octubre". Después de su derrocamiento, se le cambió el
nombre por "General Belgrano" en honor a uno de los próceres de la Revolución de Mayo de
1810.
El mismo día del hundimiento, horas antes, el por entonces
Presidente del Perú, Belaúnde Terry, mediador del conflicto, hacía llegar a
Galtieri una propuesta de paz negociada con Alexander Haig, mediador por Gran
Bretaña. Con algunas correcciones a esta propuesta, Galtieri comunicó a Terry
la aceptación de la misma. Convencido de que se había logrado la paz, Terry
brinda una conferencia de prensa televisada en Lima en la cual anunció que la
paz era inminente y que sólo faltaba la ratificación del Comité Militar en
Buenos Aires; formalidad que se cumpliría esa misma noche. Mientras se llevaba
a cabo dicha conferencia, el Submarino Nuclear Británico antes mencionado ataca
al Crucero argentino, que navegaba fuera de la zona de exclusión fijada por el
Reino Unido, con un saldo trágico.
Los mismos británicos han afirmado la criminalidad del
hundimiento del General Belgrano, aceptando que la decisión del ataque fue más
política que por necesidad militar, ya que el Crucero argentino no representaba
ningún peligro para las fuerzas británicas. Margareth Tatcher, Primera Ministro
británica, habría ordenado el hundimiento para obstaculizar las negociaciones
de paz y prolongar la guerra.
Este hecho constituye para muchos/as argentinos/as y
analistas internacionales un verdadero crimen de guerra, un acto criminal,
teniendo en cuenta además que el gobierno británico no dio aviso del ataque ni
a las autoridades argentinas ni a la Cruz Roja, dejando indefensos y desprotegidos a
los sobrevivientes.
Esta triste historia culminó con la rendición de Menéndez,
comandante argentino, ante el General Jeremy Moore el 14 de junio de 1982. La
guerra de Malvinas duró setenta y cuatro días, y tuvo un costo aproximado de
seiscientos cincuenta muertos para Argentina y doscientos setenta para el Reino
Unido.
Se propone en este proyecto de ley el cambio de nombre de la
actual calle "Newton" por la de "Crucero General Belgrano",
en memoria a todos aquellos jóvenes caídos en la cruenta Guerra del Atlántico
Sur, simbolizado a través de este hecho particularmente cruel que fue el
hundimiento del Crucero General Belgrano.
Conclusión
Para finalizar con esta fundamentación, parece oportuno
informar que recientemente la
Presidenta de la
Nación, Dra. Cristina Fernández de Kirchner, realizó un acto
en homenaje al "Gaucho" Rivero donde sostuvo: "Quiero homenajear
en el 'Gaucho' Rivero a todos los que vinieron después de él e hicieron su
hazaña de distintas maneras. Pero hoy la hazaña la tenemos que hacer los 40
millones de argentinos y el mundo civilizado, para definitivamente devolverle a
los argentinos lo que es de los argentinos, nuestras Islas Malvinas". En
dicho acto, también hizo mención al "Operativo Cóndor" llevado a cabo
por el grupo de jóvenes argentinos en el año 1966, al cual se hizo mención
anteriormente. Al respecto dijo: "Nadie pretende negarle el lugar a nadie,
pero que surjan los que protagonizaron la verdadera historia por la
emancipación y la libertad. Todos fueron muy jóvenes y muy humildes",
reseñó Cristina, al evocar las figuras de Rivero, de aquellos que
protagonizaron el Operativo Cóndor y de los combatientes de la guerra que
enfrentó a la Argentina
con Gran Bretaña en 1982.
En homenaje a todas aquellas personas que llevaron a cabo
heroicas hazañas con el objetivo de recuperar la soberanía argentina sobre las
Islas Malvinas, y la de todo un pueblo que nunca dejó de lado este reclamo, es
que proponemos denominar "Héroes de Malvinas Argentinas" a la calle "Dr.
Luis Agote", junto con los otros cambios de nombre mencionados
anteriormente.
Por todas las razones expuestas, solicitamos la aprobación
del presente Proyecto de Ley, como una manera de reivindicar el reclamo
nacional de soberanía sobre nuestras Islas Malvinas .
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